Nueva terapia podría solucionar la falta de deseo sexual en las personas

0
282
Nueva terapia podría solucionar la falta de deseo sexual en las personas
Foto: El Confidencial

En un nuevo estudio, investigadores del Imperial College de Londres, en Reino Unido, descubrieron cómo una hormona recientemente sacada a la luz llamada kisspeptina altera la actividad cerebral en voluntarios sanos, pudiendo así ser utilizado como una terapia aumentar el deseo sexual.

La hormona, conocida como el regulador de la reproducción, no solo tiene un papel crucial en la producción de espermatozoides y óvulos, sino que también puede estimular los comportamientos reproductivos. La falta de kisspetina afecta al 8% de los hombres y al 10 por ciento de las mujeres.

Conoce una terapia para aumentar el deseo sexual

En el estudio, publicado en ‘Journal of Clinical Investigation Insight’, se demostró que la hormona cambiaba la actividad en redes cerebrales clave en reposo, lo que estaba vinculado con una disminución de la aversión sexual y un aumento de la actividad cerebral asociada con la excitación sexual. 

Te puede interesar: Los tatuajes: ¿Un riesgo para nuestra salud?

Los científicos también observaron que la hormona estimuló varias redes en el cerebro involucradas en el estado de ánimo y la depresión.

Foto: Cortesía | Conoce una terapia para aumentar el deseo sexual

“Aportamos las primeras pruebas de que la kisspeptina es un tratamiento potencialmente seguro y eficaz tanto para mujeres como para hombres con bajo deseo sexual angustioso”, asegura en comunicado de prensa el doctor Alexander Comninos, del Departamento de Metabolismo, Digestión y Reproducción del Imperial College de Londres y coautor principal del estudio.

Cómo aumenta el deseo sexual

Hasta ahora se sabía que la hormona afectaba al apetito sexual cuando había algún estímulo. Pero los científicos comprobaron en un experimento con 30 voluntarios que la kisspeptina actuaba también cuando el cerebro estaba en estado de reposo, un efecto vinculado con la excitación y el deseo sexual.

Conocer cómo funciona el cerebro en reposo es importante porque permite identificar redes cerebrales de gran tamaño que tienen un papel relevante en ciertos trastornos psicológicos y conocer las hormonas que operan sobre ellos puede ayudar a encontrar medicamentos que los regulen.

Foto: Cortesía | La kisspeptina altera la actividad cerebral en voluntarios sanos, pudiendo así ser utilizado como una terapia aumentar el deseo sexual.

Otros estudios vinculan también el papel de esta hormona con la experimentación del amor y de sentimientos románticos por la influencia que tiene la kisspeptina en cómo manejamos las emociones.

Sin embargo, no hay resultados concluyentes que avalen esta teoría.

La terapia más novedosa para recuperar el deseo sexual

El deseo sexual puede verse reducido por muchos motivos externos (estrés, problemas personales…) pero también internos de nuestro propio organismo. Las hormonas controlan todas las funciones del cuerpo humano incluyendo el sistema reproductivo, el inmune y el metabólico. Por eso, cuando los niveles hormonales descienden, bien sea debido al proceso natural del envejecimiento, al estrés, a los cambios en la dieta o a la menopausia, en el caso de las mujeres, conlleva una pérdida de la energía, la vitalidad, la libido y la salud.

Las hormonas del deseo sexual, son los estrógenos y la testosterona. En el caso de las mujeres, la libido cambia según la edad. Aumenta con el tiempo, alcanzando la madurez sexual hacia los 35 años, pero también puede disminuir con la llegada de la menopausia. Las mujeres jóvenes tienen más cantidad de éstas hormonas, por eso su interés por el sexo es elevado e intenso. 

Foto: Cortesía |

Los cambios hormonales que se producen durante el ciclo menstrual influyen de manera clara en la intensidad del deseo sexual, ya que en los días de ovulación hay un pico de estrógenos (mayor deseo). Cuando una mujer se queda embarazada, la libido también aumenta debido al aumento de las hormonas y después del parto, se segrega prolactina, hormona ‘anti deseo’ que en algunos casos puede hacer que sea menor. Durante la menopausia las hormonas se van reduciendo y esto es negativo para el deseo sexual.

Una reducción temporal del interés sexual no se considera disfunción sexual y puede estar causada únicamente por estrés, agotamiento físico o un exceso de trabajo o preocupaciones. Cuando esto se alarga en el tiempo es cuando debemos empezar a preocuparnos y consultar a un especialista en la materia.

Innovación para la calidad sexual

Enfocados en reestablecer ese equilibrio hormonal con el objetivo de ralentizar el proceso de envejecimiento humano y conseguir, con esto, una mejora de la calidad de vida, así como, la prevención de patologías diversas, existe una terapia innovador que se lleva a cabo con hormonas bioidénticas. Y te preguntarás: ¿eso qué significa?

Desde Clínicas Doctor Life nos explican que se trata de una especialización para ofrecer a los pacientes el tratamiento de reemplazo con hormonas bioidénticas, que consiste en utilizar hormonas biológicamente idénticas a las que se originan y crean en el propio cuerpo humano.

Foto: Cortesía |

Este novedoso tratamiento se presenta como una alternativa más natural ya que las hormonas bioidénticas, a diferencia de las sintéticas, proceden, en primera instancia, de fuentes naturales y vegetales que después se modifican directamente en el laboratorio. Esto hace que sean más seguras para el organismo ya que no producen prácticamente ningún tipo de daño, agresión o efecto secundario.

Cómo funciona para aumentar el deseo sexual

La terapia se utiliza en aquellos pacientes que generan una cantidad inferior de hormonas a las habituales y necesarias en sangre, en concreto los estrógenos y la progesterona.

La terapia con hormonas bioidénticas para aumentar el deseo sexual, se basan en recobrar el equilibrio de las hormonas más necesarias para el organismo como la DHEA (conocida como la hormona de la juventud), la testosterona (que ayuda a que el deseo sexual sea mayor), la pregnenolona (con efectos antidepresivos y ansiolíticos) el estradiol, la progesterona y la hormona tiroidea.

Con información de | TN | Vozpopuli

Obtén información al instante, únete a nuestra comunidad digital

Síguenos en nuestras cuentas de Redes Sociales

Instagram: @madridnews24

Twitter: @madridnews24es

Facebook: Madridnews24