El Ayuntamiento solicitará este jueves la declaración de zona catastrófica

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El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha calculado este miércoles los daños del temporal ‘Filomena’ en la capital en «varios cientos de millones de euros«, por lo que solicitará mañana en Junta de Gobierno la declaración de zona catastrófica para la capital, según ha avanzado el regidor a través de sus redes sociales.

Ya el regidor había señalado esta mañana que «desde el punto de vista jurídico es viable» esta solicitud y en cuanto a los supuestos ha indicado que «hay daños muy importantes tanto en bienes privados como municipales». Ademas, Martínez-Almeida ha explicado que esta declaración prevé «líneas de subvenciones y avales» para comercios que hayan sufrido pérdidas así como una «aportación de fondos al Ayuntamiento».

En una entrevista en ‘Herrera en COPE‘, el regidor también ha señalado que sólo en infraestructuras el coste de Filomena va a ser muy alto, pero también hay cuantiosos daños para la restauración o la agricultura. En este sentido, Almeida ha puesto como ejemplo que el consistorio se va a gastar 15 millones de euros «para revisar todos los árboles de Madrid en menos de 60 días» y que acaba de comprar 3 millones y medio de kilos de sal, que se suma a toda la comprada anteriormente a la nevada.

Por este motivo, Almeida pide al Gobierno «que sea comprensivo con la situación de la ciudad» y recuerda las ventajas que supondría declarar zona catastrófica a Madrid: «Facilitaría considerablemente la vida de los ciudadanos en la agilización de las reclamaciones que tengan que hacer y se pueden establecer líneas de subvenciones y ayudas para los diferentes sectores económicos de la ciudad. Además, por supuesto, se aportarían fondos al ayuntamiento para hacer frente a los gastos de Filomena«, ha dicho.

En todo caso, Almeida ha agradecido la colaboración del Gobierno con Madrid y asegura que nunca se ha sentido desprotegido. Ahora, lo más preocupante son las caídas por el hielo en las calles y los desprendimientos en cornisas. Para facilitar el tránsito, el Ayuntamiento ha contratado a 1.200 personas más para trabajar en todos los obstáculos. «Trabajaremos más lentamente de lo que a los madrileños les gustaría, pero estamos haciendo todo lo posible», ha dicho.