La Inspección de Trabajo y Seguridad Social ha enviado ya 112.000 cartas a empresas advirtiendo de los riesgos que supone trabajar bajo las altas temperaturas que ya empiezan a notarse en esta época del año en buena parte del país.
Este envío de misivas, que se realiza todos los años, supone el pistoletazo de salida a la campaña de vigilancia especial de verano, que en esta ocasión también pondrá el foco en detectar irregularidades en las contrataciones en los sectores de mayor actividad.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha presentado este miércoles las líneas maestras del plan de la inspección para este verano.
El factor más condicionante de estas fechas son las temperaturas extremas. La primera pata del plan será vigilar que las empresas cumplen con la normativa de prevención de riesgos laborales en lo que atañe al calor. Se vigilará especialmente el sector agrario y la construcción, que son las actividades con más riesgo, ha trasladado Díaz.
El año pasado, la inspección de trabajo contabilizó 11.500 infracciones por incumplimientos en esta materia.
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