La dirección de Junts per Catalunya decidió este lunes en Perpiñán (Francia) poner fin a su relación con el Ejecutivo de Pedro Sánchez. La decisión fue adoptada por unanimidad, tras la intervención del expresident Carles Puigdemont, quien marcó la línea a seguir durante la reunión.
El partido ofrecerá una comparecencia pública a las 17:00 horas para detallar los pasos a seguir, aunque la militancia deberá confirmar la ruptura a través de una consulta interna.
Mientras tanto, el president de la Generalitat, Salvador Illa, pidió a Junts actuar con “sentido común” y advirtió que la alternativa al actual Gobierno sería “la involución”.
Desde el PSOE, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, aseguró que Puigdemont es “prisionero” de Sánchez, y que el Gobierno, a su vez, depende de Junts. También alertó de que será “muy complicado” evitar un adelanto electoral antes de 2026.



