Castro Urdiales, España – Una tragedia ha conmocionado a la comunidad de Castro Urdiales, en Cantabria, donde un niño de 12 años, de origen vasco, ha perdido la vida tras caer por un acantilado de 20 metros mientras jugaba con un amigo.
El fatídico accidente ocurrió el martes 5 de agosto en el barrio de Cotolino, y ha movilizado a un amplio dispositivo de rescate que, a pesar de los esfuerzos, no pudo evitar el desenlace más triste.
El suceso se desencadenó tras la llamada de un vecino que presenció el accidente, lo que activó de inmediato a los equipos de emergencia. En el lugar se desplegaron efectivos de la Guardia Civil, la Policía Local y los Bomberos.

Sin embargo, la complejidad del terreno, que era inaccesible tanto por tierra como por mar, hizo necesaria la intervención de un helicóptero de rescate para poder llegar hasta el menor.
El niño fue rescatado y, a pesar del fuerte golpe en el pecho que había sufrido, fue trasladado de urgencia por aire hasta el aeropuerto más cercano, desde donde una UVI móvil lo llevó al Hospital Universitario Marqués de Valdecilla en Santander.
A su llegada, los médicos lucharon por su vida, pero lamentablemente, el menor, que había entrado en parada cardiorrespiratoria, falleció en el hospital.
La Guardia Civil ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias exactas del accidente. Aunque todo apunta a que se trató de un evento fortuito mientras los dos amigos jugaban cerca del acantilado, las autoridades buscan recabar todos los detalles para confirmar la hipótesis.
La muerte del niño ha causado una profunda conmoción en las comunidades de Castro Urdiales y del País Vasco, de donde procedía la familia.
Este trágico accidente sirve como un doloroso recordatorio de los peligros inherentes a los entornos naturales y la importancia de extremar las precauciones, especialmente cuando se trata de niños.