Una situación de emergencia biológica se ha desatado en el río Manzanares, a su paso por los términos municipales de Perales del Río y La Marañosa, en Getafe, tras el hallazgo de cientos de cadáveres de cigüeñas. Durante cuatro días consecutivos, equipos de bomberos y guardias forestales han trabajado arduamente en condiciones de riesgo biológico para retirar la impactante cantidad de aves muertas que flotaban en el agua o se acumulaban en las riberas.
Los primeros en dar la voz de alarma fueron agentes de la policía local, ante una imagen que los propios bomberos calificaron de «dantesca». Según estimaciones operativas, se han recogido más de 400 ejemplares de cigüeñas muertas.
Discrepancia sobre el Diagnóstico y Protocolos
Aunque la Consejería de Medioambiente de la Comunidad de Madrid (CM) confirmó que se trata de un brote de Gripe Aviar, sostiene oficialmente que la cepa es de «baja patogenicidad», lo que, según sus criterios, se excusa de la obligación de informar al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
Sin embargo, esta clasificación ha generado gran controversia. La descripción oficial del Ministerio para la gripe aviar de baja patogenicidad es la de una enfermedad leve o asintomática, lo que contradice frontalmente la alta tasa de mortalidad masiva observada en el río.
El personal que participó en la retirada de los cuerpos ha manifestado gran preocupación por la falta de transparencia. El sindicato de bomberos denunció que los resultados de los análisis no se han comunicado de manera oficial a la plantilla, ni se ha establecido un seguimiento obligatorio para quienes estuvieron en contacto directo con este material de riesgo biológico.
Alarma Local y Antecedentes Regionales
La alarma ha sido elevada también a nivel político y local. El Ayuntamiento de Getafe, que fue el primero en alertar del suceso, no ha recibido información oficial de la CM sobre los resultados de los análisis. La alcaldesa Sara Hernández remitió una carta al consejero Carlos Novillo expresando su inquietud por la situación en una zona frecuentada por paseantes y cercana a un carril bici.
Desde la Comunidad se ha indicado que los cuerpos de las cigüeñas están siendo trasladados a una incineradora en Colmenar Viejo. Las autoridades sanitarias recuerdan que, en general, el riesgo de contagio al ser humano se considera «muy bajo». No obstante, este episodio se suma a un contexto reciente de alta alerta en la región: el mes pasado, la CM tuvo que sacrificar casi medio millón de gallinas en una granja de Valdemoro para controlar un foco de gripe aviar (H5N1), demostrando la vulnerabilidad del ecosistema madrileño ante la enfermedad.
