La actriz británica Kate Winslet ha establecido un nuevo hito en la historia del cine al romper oficialmente un Récord Guinness durante la filmación de Avatar: The Way of Water. Winslet logró realizar la apnea subacuática más larga jamás registrada por un actor o actriz en un set de rodaje, deteniendo el cronómetro en 7 minutos y 15 segundos.
Con esta marca, la ganadora del Oscar supera el récord previo que pertenecía a Tom Cruise, quien aguantó la respiración durante seis minutos para una escena de Misión Imposible: Nación Secreta. La hazaña de Winslet no fue fruto del azar, sino de un intenso programa de entrenamiento de varias semanas junto a buceadores profesionales y expertos en freediving (buceo a pulmón).
Compromiso con la autenticidad
A diferencia de otras producciones que optan por efectos digitales o trucos de cámara, el director James Cameron exigió que los actores aprendieran técnicas de apnea para rodar en tanques de agua reales. Winslet, que interpreta a Ronal en la cinta, decidió llevar su preparación al límite para poder interpretar sus escenas de acción sin interrupciones y con una gestualidad natural bajo la presión acuática.
«Fue brillante y me sentí muy orgullosa de mí misma», declaró la actriz tras el logro. Este récord subraya la disciplina física y el compromiso artístico de Winslet, consolidándola como una de las profesionales más entregadas de la industria cinematográfica actual.
